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| Julio Cesár Rodríguez |
El Centro Regional de Investigaciones Ambientales (CRIA) propuso el Curso “Aprovechamiento de los arribasones de macroalgas marinas para la elaboración de compos” para el Congreso Venezolano de Ecología que se va a realizar en el mes de noviembre de este año en la Isla de Margarita.
El profesor Julio César Rodríguez, coordinador del CRIA tiene una dilatada experiencia en la elaboración de abono orgánico por ello es responsable en este momento de un programa de capacitación y promoción de composteros escolares y comunitarios, para que muchas personas en Margarita conozcan la importancia de esta práctica.
Permanentemente están dando charlas en las escuelas y las comunidades. “Con los consejos comunales estamos promocionando la creación de centros de compostaje pero con la visión de pequeñas empresas, cooperativas, que se pueden convertir en grandes compañías de mucha utilidad”, comentó.
El piloto
Para ello ha desarrollado un programa piloto en las propias instalaciones del Núcleo de la UDO en Nueva Esparta, ubicado en Guatamare, que se caracteriza por su verdor. “Aprovechamos los desechos orgánicos vegetales, esos que salen de cualquier cocina, luego se mezcla con desechos vegetales de la naturaleza como son las hojas secas, madera, plantas secas y también estamos utilizando algas, desechos orgánicos de origen animal rico en grasa y lodos de las plantas de tratamiento, que son ricos en nutrientes”.
Los desechos vegetales generalmente se secan al sol para poder llevarlos al contenedor donde se hará la mezcla. Las algas deben pasar por un proceso de lavado para quitarle la arena y la sal. Y con relación a los desechos de origen animal crearon un horno para poder acelerar el proceso de deshidratación de manera de poder controlar la plaga.
Todo este material de mezcla y se coloca en un contenedor de un metro cúbico, por capas y luego se deja reposar para que se inicie el proceso natural de descomposición. El tiempo que debe pasar es relativo ya que depende de los desechos utilizados, la temperatura, y otros factores, pero por lo menos debe pasar un mes. El color y la composición de la materia es la que generalmente indica cuando puede utilizada o comercializada. La materia orgánica pierde volumen, simulando una especia de tierra y el color es marrón oscuro, como de tierra húmeda. “Lo que queda al final es un 50% de todo el material que se deposita en el contenedor”.
En el centro piloto tienen sembrado tomate margariteño, berenjena, lechoza, plátano. Por lo menos tres contenedores están haciendo el proceso cuyo producto se aprovecha para las otras plantas que tienen en el vivero.
Comunicación ambiental
El edita desde hace varios años la Revista Eco Cria, un documento digno de coleccionar sobre todo por la relevancia de los temas que tratan, muchos de ellos importantes investigaciones. Igualmente cada dos años realizan el concurso de fotografía ambiental, para motivar al público en general a retratar la belleza de la naturaleza como una actividad de sensibilización.
CNP 9983
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