miércoles, 4 de julio de 2012

Buscan mejorar gestión ambiental y manipulación de alimentos en el Mercado del Pescado

El popular Mercado de Los Cocos o Mercado del Pescado de Porlamar es frecuentado por locales y visitantes para adquirir pescado fresco. Se caracteriza por ofrecer una gran variedad y muy buenos precios. Sin embargo, los procedimientos “domésticos” para comercializar los productos, es una preocupación que difícilmente pasaría un riguroso examen sanitario.

Esta preocupación fue acogida por la alcaldía de Mariño, ente que administra el Mercado, la cual permitió la puesta en marcha del proyecto de Gestión Ambiental y Control de Calidad de los Alimentos que se expenden en el lugar, de la Cooperativa Socio Proyectos Ambientales (CSPA).

Luis Acosta está al frente de la iniciativa y comenta que se activaron en noviembre del 2011. “Los primeros 4 meses estuvimos bajo perfil, observando los procesos, sin dar mayor información para conocer cómo estaban trabajando de verdad los vendedores de pescado, marisquería, empanaderas, los de frutas y vegetales y víveres en general. Pensamos que si le alertábamos a lo que íbamos, podrían ser más cuidados, lo que afectaría esta primera fase”, comentó el entrevistado.

En esta observación pudieron detectar varias prácticas que deben mejorarse. “Una de ellas son las tablas de madera para limpiar y cortar el pescado, ya que se convierten en germinadoras de bacterias. Deben ser cambiadas por tablas de plástico. En la parte ambiental, hemos visto que las vísceras de los pescados las arrojan al mar porque son alimento para los alcatraces y otros peces, pero en muchos casos también arrojan desechos plásticos y otros”, detalla Acosta.

El Mercado del Pescado tiene en este momento 98 puestos activos, de los cuales 63 se dedican a la venta de productos del mar. Cuentan con una especie de cubículo con surtidor de agua. Exponen sus productos sobre una mesa de concreto, y limpian los pescados en el momento de la venta. Hay otros locales que venden pollos y gallinas que benefician en el momento. Pero lo que más llamó la atención fue la venta de carne al aire libre, sin ningún sistema de refrigeración.

Monitores
El programa cuenta con el apoyo económico del Fondo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Fonacit), y una de las metas es lograr crear un grupo de Monitores Sanitarios Ambientales, que van a ser personas de la misma comunidad. “Ya estamos coordinando conversaciones con los Consejos Comunales de la zona, para involucrarlos y también para que ejerzan la Contraloría Social”.

Para que el proyecto perdure en el tiempo, la Cooperativa desea realizar un Manual de las Buenas Prácticas en los Proceso del Mercado de Los Cocos, de manera de que se convierta en la referencia para estos monitores.

Buenas prácticas 

La alcaldía de Mariño ha estimado la generación de parte de la iluminación del lugar con energía solar, con unos postes que tienen unos pequeños paneles solares para activar este tipo de energía renovable. 
Otra de las prácticas es la que hacen algunas personas con los desechos orgánicos que se generan, ya que se los llevan para hacer abono o para alimentar a los cochinos.

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