Son esas personas que usan la bicicleta para ir a trabajar, comprar, ir al cine. Para ellos, para nosotros, la bici es un modo de transporte perfecto para desplazamientos cortos en la ciudad. La bici urbana sirve para mucho y no solamente para sacarla cada cuatro domingos.
Para que tengan una idea del alcance que esta práctica tiene en otros países les comentamos que los españoles que utilizan la bicicleta casi a diario en sus desplazamientos. Este uso ha aumentado en un millón en cuatro años, hasta alcanzar tres millones de usuarios en 2011, mientras que quienes la usan sólo con alguna frecuencia ya alcanza los 15,5 millones. Estos datos provienen del Barómetro Anual de la Bicicleta, presentado por la Dirección General de Tráfico (DGT).
En Nueva Esparta su uso también está generalizado, aunque no poseemos estadísticas. En las zonas menos pobladas (alejadas de Porlamar) su uso es muy frecuente. Las vías normales se convierten en “ciclovías”, por lo que le advertimos a los conductores foráneos tener un poco de precaución y paciencia.
Y según la apreciación propia, son muchas las personas de la tercera edad las que se mueven a dos ruedas usando su cuerpo como energía principal. Esta es una de las razones que apoya la creación de carriles exclusivos para estos “ciclistas urbanos”, ya que son más vulnerables. Solo dejo esta frase tomada de la película “Campo de Sueños”: Si lo construyes, ellos vendrán.
¿Cómo debe ser una bici urbana?
El cuadro: Barra alta o barra baja...Depende de tus preferencias. Aunque sí es verdad que una bici con barra baja (lo que algunos llaman modelo de mujer) permite que podamos bajar y subir de la bicicleta con mayor comodidad y facilidad. Importante sobre todo cada vez que tengamos que parar ante un semáforo rojo.
Luces y reflectantes: Importante son las luces delanteras y traseras. La luz dinamo tiene la ventaja de ser potente pero en la parte trasera conviene tener una luz que funcione con pilas. ¿Por qué? Si la luz trasera funciona con pilas, cuando paras en un semáforo sigue encendida. Además de luz, es aconsejable que tu bici este equipada con reflectantes.
Parrilla trasera: Conviene que la parrilla trasera sea robusta y que nos permita llevar carga.
Cubre cadenas: Para que no te ensucies los pantalones y para que no se te enganchen. Si se te engancha el pantalón, no solo lo has estropeado sino que también puedes perder el equilibrio y causar un accidente.
Cambios: No necesitas tener 21 velocidades. El que te diga lo contrario seguramente no ha montado mucho en bici por la ciudad. Es sufiente en al gran mayoría de los casos una bicicleta de 3, 5 o 7 velocidades.
Guardabarros delanteros y traseros: En caso de lluvia evitan que te llenes de agua sucia
Sillín confortable: Se ofrece a la venta distintos diseños y anchuras. Lo importante es que estés cómodo (los sillines anchos suelen ser más comodos en la ciudad), pero recomendamos uno que este bien acolchado.
Potencia y manillar: Si puedes ajustar en altura mejor, pero son pocos los modelos urbanos que ofrecen esta posibilidad. Más importante es que el manillar este "abierto" para que tengas una posición lo más recta posible.
Cubiertas: Las cubiertas deben ser resistentes a los pinchazos. También es recomendable que entre los radios tengan un reflectante que de noche te permita ser visto desde el lateral.
Timbre: Para avisar tu llegada. No es absolutamente necesario pero es un accesorio práctico.
Fuente: http://www.labiciurbana.com
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