“El pastel de chucho más grande” atenta contra la pesca sostenible en Margarita

El Chucho está en peligro de extinsión

La Red Social Ambiental y la Red Social para el Bienestar de la Fauna Silvestre del Estado Nueva Esparta alertan sobre una de las actividades que aparecen en la agenda del evento “Margarita Gastronómica”, denominada “El Pastel de Chucho más grande del mundo” a realizarse el día 6 de octubre de este año, debido a que se trata de una especia marina en peligro de extinsión.


El responsable de la actividad es el reconocido chef Sumito Estevez, a quien las redes le hacen las siguientes preguntas: ¿Sabe usted cuántos kilos de chucho se necesitan para hacer este pastel? ¿Sabe usted cuántos chuchos y de qué tamaños se necesitarán para hacer este pastel? Y le dicen categóricamente: “Se trata de una especie considerada como altamente vulnerable a la explotación pesquera y catalogada actualmente con el estatus de conservación de “especie amenazada” a nivel global (IUCN, 2007)”. Una película animada, llamada “Hoy no se hace Pastel de Chucho”, advertía sobre esta situación.

María Capecchi, vocera de la Red informó a través de una nota de prensa que “este evento que se realizará en el mes próximo de octubre en la isla de Margarita comprende una serie de actividades loables para impulsar los valores gastronómicos del Estado, pero nos encontramos con una actividad nada loable y nada altruista y sobre todo nada sustentable ni ambientalista como lo es la realización del “Pastel de Chucho más grande del mundo” actividad ésta que nos hace prender luces de alarma para informar sobre la situación de la pesquería de la especie Chucho pintado”.

Investigación

Como investigadora en la materia se refiere a un estudio científico realizado recientemente de la pesquería del chucho pintado en la zona del Archipiélago de Los Frailes por biólogos marinos residentes en la isla de Margarita (Cordoves et al, 2009) que concluye: “la pesquería artesanal del chucho pintado estaría ejerciendo un impacto negativo sobre este recurso; ello debido a la captura de proporciones elevadas de individuos sexualmente inmaduros, práctica ésta que afecta directamente el proceso de reclutamiento y capacidad de renovación de las poblaciones”.

“Es necesario realizar mayores esfuerzos con el propósito de continuar monitorizando la pesquería del chucho y evaluar los aspectos biológicos más importantes de la especie para establecer épocas de veda y tamaños mínimos de pesca. A pesar de la importancia comercial del chucho pintado existe una incertidumbre con relación a los volúmenes de captura y niveles de abundancia de esta especie”, acota la experta agregando: “Instamos al colectivo Margarita Gastronómica a sumarse a los esfuerzos para la pesca sustentable y preocuparse por la explotación excesiva de las rayas y los tiburones para su uso gastronómico”.

Cuestión de hábitos

La Organización Gastronómica Mundial también alerta sobre el tema: "La restauración es un elemento indispensable para transformar el mercado del pescado y educar a los consumidores a la hora de proteger los recursos del planeta. Los cocineros y restauradores juegan un papel clave para influenciar a los consumidores en las decisiones de especies a comprar. Si deseamos afrontar en serio esta cuestión, los menús han de ser revisados y los clientes informados y ayudados a fin de que puedan cambiar sus hábitos alimentarios".

"Los pescados alternativos, por otra parte, ofrecen la posibilidad de reinventar platos y elaborar nuevas ideas, y son además motivo para la recuperación de antiguas recetas basadas en los recursos locales disponibles y no sujetos a amenazas de extinción. En muchos países el pescado se consume especialmente en los restaurantes; los cocineros y los restauradores, por tanto, están en primera línea en el proceso de cambio de hábitos y tendencias vinculadas con su consumo". 

Capecchi: "Puede parecer exagerado, pero visto que con la pesca hemos casi vaciado los océanos, será cuestión de comenzar a cambiar nuestros hábitos: sin peces pequeños no hay peces grandes, y sin peces grandes no hay océano. No digo que debamos dejar de consumir pescado y otros productos de la mar, pero existe un equilibrio del que hemos de ser conscientes y respetar, comenzando por no comer determinadas especies”.

Informe completo de la Red Social y Ambiental de Nueva Esparta